Con una nota olfativa alta su aroma es fresco, suave y revitalizante. Su olor gusta mucho a los niños y les resulta agradable, por lo que lo podemos añadir siempre a las mezclas aromaterapéuticas infantiles.
El aceite se obtiene por presión de la cáscara y su principio activo predominante es el limoneno y g-terpineno.
Es una esencia perfecta para utilizar en difusor y conseguir un ambiente relajante en casa. Muy seguro para usar en niños, incluso bebés.
Pon unas gotas de mandarina sobre un aceite base y notarás como ayuda a conciliar el sueño. No busques concentrar mucho su aroma con las puertas cerradas. Recomendamos poner el difusor sin los niños dentro.
Precauciones
No ingerir. Evitar el contacto con los ojos. Mantener fuera del alcance de los niños. No se recomienda su uso durante el embarazo, periodo de lactancia ni en niños menores de 3 años. No es tóxico si se aplica vía cutánea.
Es fotosensible. No exponerse al sol después de su aplicación.
Composición:
Aceite de cáscara de Citrus Reticulata
